martes, 11 de marzo de 2014

Castle of glass.

Silencio. Alojado en mi mente. No hay ni un resquicio a la emociones sin palabras. ¿Cómo sentir sin palabras? ¿Cómo expresar sin sentir? Las palabras giran a mi alrededor, gritan, susurran, sufren, pero no puedo alcanzarlas. Se hallan muy lejos de mi. Efímeras ejercen presión en mí. Quiero gritar privada de voz. Quiero llorar privada de lágrimas. ¿Cómo recuperar de lo que he sido despojada? Solo el detonante alberga el caos. La capacidad de la transición de sumisión a hiper sensibilidad. Cuando eres disparado no lo sientes tras varios segundos, me encuentro en esos segundos transformados en días. Solo dos palabras me incitan a pronunciarlas; Amor y muerte. Ubicándome en discrepancia, ¿cuál he de elegir implicando todas las emociones y el don de las palabras que vendrán con ellas?